Sabéis que no acostumbro a hacer críticas de monologuistas. Pero en esta ocasión voy a hacer una excepción. ¿Por qué? Pues porque me da la gana, que para algo el blog es mío. Y porque el espectáculo de Gabriel Córdoba me parece digno de mención.
Y es que, no en vano, es la primera vez que veo a un monologuista de aquí (y aquí en este caso es España) que se muestra abiertamente gay sobre el escenario y dedica parte del monólogo a tratar el tema. Y aunque solo sea por romper con la uniformidad hetero del panorama, ya vale la pena acercarse a la sala Ars.
Y es que ver a Gabriel haciendo chistes sobre cómo le explicó a su madre que era gay y como ella cree que todo esto es temporal o se debe a alguna imprudencia infantil me resultó tan gracioso como refrescante. También me encantó asistir a un monólogo sin chistes machistas, la verdad. Por otro lado, Gabriel es de Murcia y no duda en explotar a fondo su lugar de origen para despertar nuestras risas: su acento, su forma de expresarse y la idiosincrasia de sus paisanos dan para mucho, os lo aseguro.
Gabriel Córdoba redondea el espectáculo salpicándolo de canciones en directo, que por algo es un superstar que ha venido a la capital a ser artista, y el conjunto acaba siendo una hora de risas que nos demuestran que hay otras formas de hacer humor. Muy recomendable.